Según Irene Vallejo, ni Sócrates, ni Pitágoras, ni Diógenes, ni Buda ni Jesucristo dejaron escritos. Sin embargo en los redes, blogs y demás escribimos demasiadas banalidades y muchas tonterías. Pero lo peor es la reproducción de textos de carácter dogmático, proselitista y de cosas peores.