2.-Si el tiempo y dinero gastado en comprar cámaras se hubiese gastado en ver exposiciones, leer libros, asistir a talleres y compartir experiencias, hubiesemos logrado mejores fotos con cámaras relativamente sencillas.
3.-Con las mascarillas pasa algo parecido. No siempre las más caras son las mejores. Saber utilizarlas y seleccionar la más adecuada es mucho mejor para nuestra salud y la de los demás.