Hay muchas de comerse, y de pelar, una naranja. A mi me gusta mucho partirla por la mitad y a ser posible compartirla con mi media naranja. También me encanta poner un trozo de naranja en el té y en los guisos. Reconozco que no se me da demasiado bien pelarlas como la de la foto. Sin embargo, no acostumbro a tirarlas por ahí.