Tino Soriano (2005): Catalans. Ed. 62, Barcelona
Confieso que tengo una sana envidia por Tino Soriano. Hace buenas fotos, escribe bien y se interesa por la fotografía médica. Tino es el autor de las fotos y de la mayoría de los textos. De esta forma podemos descubrir de primera mano las claves de su trabajo. Cuando un fotógrafo escribe bien no hay crítico, periodista o historiador que pueda compararse. El señor Soriano reconoce su influencia por el libro de Robert Frank
The Americans. También se inspiró en Els barcelonis, libro de Xavier Miserachs, Oriol Maspons y Colita. También reconoce la ayuda de una beca de La Caixa y de varios encargos profesionales.
El libro me ha entusiasmado pero hay una cosa que no me ha gustado nada; la foto de los jubilados jugando al ajedrez en una residencia de ancianos de Vic. La imagen podría aclararse y el texto debería señalar el papel del ajedrez en la salud mental de los jugadores.
En general las imágenes dignifican a los fotografiados. Sin embargo algunas fotografías son duras. Reflejan situaciones de pobreza, aislamiento y marginalidad preocupantes. Por otra parte estas y otras situaciones más ásperas se dan en Cataluña y en otras partes.
Soriano es amigo del color, del gran angular y de la fotografía con luz ambiente. No he encontrado en ningún momento referencias al concepto de fotografía artística, fotografía creativa y cosas por el estilo. Sus comentarios son de carácter nacionalista. De una persona que ama profundamente a las gente de su tierra y que al mismo tiempo es un reconocido viajero y fotógrafo del National Geographic
