Los niñatos de la generación nini
Engordan las listas del paro y del fracaso escolar. A veces me dan pena, en ocasiones me dan miedo y con demasiada frecuencia no me dejan dormir, leer o escuchar música con tranquilidad. Hablan a gritos con palabras vulgares y vacías, cultivan el gregarismo más inútil y malgastan su juventud.