domingo, 22 de enero de 2012

Árbol navideño

En su día fue un árbol navideño cargado de serpentinas, bolas, luces regalos e ilusiones. Hoy no es más que un montón de hojas gastadas. Pero, a diferencia del cuento cortaciano, dificilmente volverá a renacer. Nuestro querido ayuntamiento a creado unos corralitos para recoger estos cadáveres esquisitos. Pero también acaban siendo abandonados en los alrededores de los contenedores. No se si los recuperadores de basuras los reciclan para darles una segunda oportunidad de demostrar su valía.