domingo, 25 de diciembre de 2011

Banco bueno, banco malo

En invierno los bancos soleados andan muy disputados por los ancianos. Tal parece que el Astro Rey es más importante que la relativa (in)comodidad de la mayoría de los bancos. Me parece buena la idea de poner cojines. Pero hay ciertas mejoras que deben ser cosa de nuestro querido ayuntamiento. Mi deseo para el próximo año es que todos los bancos sean buenos. Incluso en los que antes se concedían préstamos e hipotecas y ahora casi no te dan ni los buenos días. Ahora bien, adelante si por crear un banco malo se arregla o atempera la crisis. Si es necesario me haré un bloguero malo, o incluso malísimo.