Las apariencias engañan. Un cristal roto con cierta gracia y sobreexpuesto por el que escribe y fotografía puede confundirse con estalactitas y estalagmitas y una casa abandonada puede recordarnos a una habitación rural de 5 estrellas. Seguro que Joan Fontcuberta y otros artistas sacarían mucho más de esta foto y de esta entrada. Pero con el calor que hace y con el dolor de muelas que sufro no se me puede pedir más. Gracias por leerme.