domingo, 15 de septiembre de 2013

La vida como una estafa


Tarde o temprano percibes que te han engañado de manera miserable, cruel, cínica, inmisericorde, espantosa, execrable, vomitiva y apestosa. Las estafas bancarias hieden a basura financiera, exudan un sadismo infinito y demuestran que la banca siempre gana. Eso si, su publicidad nos regala la mejor de las sonrisas. No te fíes en absoluto. Buena suerte.