Woody Allen dejó escrito en algún sitio que le gustaría transformarse en los dedos de Warren Beatty. Yo soy más ambicioso y puestos a elegir nada mejor que ser su preservativo favorito. Cuantas historias inconfesables podrían contarnos los profilácticos que usaba el señor Beatty. Sus condones conocieron las intimidades de algunas de las actrices más atractivas de Hollywood. Pienso en ello y se me quitan los achaques y los años de más.
Y ahora hablando en serio. Por favor, tiren los preservativos usados al cubo de la basura o a una papelera. Muchas gracias.