viernes, 24 de febrero de 2012

Un montón de maderas gastadas

En su día estos listones formaron parte de un mueble y unas manos afortunadas los desmontaron para comprar un armario mejor. Pero antes fueron un árbol y unas manos de leñador las convirtieron en madera. Ahora mismo no son más que un montón de maderas gastadas que esperan que unas manos hábiles las vuelvan a transformar en el mueble que fueron, que unas manos inventivas les den la forma de otro mueble, que unas manos mágicas las hagan volver a renacer en forma de árbol, que unas manos de basurero las recicle o bien que unas manos llenas de frío las quemen y las transformen en calor.