martes, 30 de octubre de 2012

Charcos

La lluvia sirve para mucho más que regar los campos, limpiar de polución las ciudades, causar atascos de tráfico y dar vidilla a los fabricantes de paraguas. Tras la tempestad llega la calma y, normalmente, muchos charcos. Algunos reflejan bellas imágenes de la burbuja inmobiliaria.