lunes, 28 de septiembre de 2015
La fotografía y los demás
Sería bueno clarificar hasta que punto pensamos siempre en alguien ajeno a la imagen mientras fotografiamos. ¿Hasta que punto nuestra mente se concentra para olvidarse de todo lo que sea ajeno al tema de nuestra fotografía? Personalmente me abstraigo, por ejemplo, mucho más cuando juego una partida de ajedrez más o menos seria. Tal vez por eso no sea un buen fotógrafo.
La fotografía y las buenas costumbres
Algunas mentes estrechas censuran como mala costumbre el tomar ciertas fotografías. Creo que en general tomar fotografías es una buena costumbre. Desde luego mucho mejor que la de ejercer de censor y dictar lo que es bueno y lo que es malo.
Lluvias intensas, besos intensos, fotografías intensas
Reflexiones sobre fotografía e intensidad
Nunca dejaré de ser un rostro pálido. Siempre admiraré el colorido de las camisas hawaianas o de las vestimentas de algunos hombres y mujeres africanos. Es fantástico disfrutar de la intensidad de un beso o de una tormenta de verano. En general no me entusiasman las fotografías con colores muy recargados. Prefiero degustar la intensidad de un positivo en blanco y negro con papel baritado.
Nunca dejaré de ser un rostro pálido. Siempre admiraré el colorido de las camisas hawaianas o de las vestimentas de algunos hombres y mujeres africanos. Es fantástico disfrutar de la intensidad de un beso o de una tormenta de verano. En general no me entusiasman las fotografías con colores muy recargados. Prefiero degustar la intensidad de un positivo en blanco y negro con papel baritado.
Según pasan los años
Según pasan los años la experiencia nos desborda, la memoria flaquea, la fuerzas no fallan, la fatiga nos abruma y el escepticismo nos desalienta. Matar el tiempo con la fotografía es un buen medio para desafiar al destino, refrescar la memoria, documentar tu entorno, y tratar de hacer alguna que otra buena foto.
Por un beso de la flaca, por una foto de la flaca
Si fuera cantaautor o crítico musical me atrevería a modificar la letra de la célebre canción de Jarabe de Palo. Sin menospreciarlos, no creo que los besos de las flacas sean mejores ni peores que los de otras mujeres más entradas en carnes. Sin embargo es justo reconocer que la cámaras fotográficas y las de cine-vídeo agradecen los rostros y cuerpos más bien delgados.
Picotear entre horas, fotografiar entre horas
Les doy mi palabra de honor que no engorda en absoluta fotografiar entre horas. Más bien ayuda a adelgazar un poco.
viernes, 25 de septiembre de 2015
Hacer fotos y hacer números
Aumentaría nuestro respeto y valoración por la fotografía si tuviésemos en cuenta el tiempo, el dinero y el esfuerzo que lleva tomar una buena foto.
Colesterol bueno, colesterol malo, fotografía buena, fotografía mala
A ver cuando inventan un Danacol o algo parecido para que mejore la calidad nuestras fotografías. Mientras tanto deberemos esforzarnos por hacer buenas fotos.
lunes, 21 de septiembre de 2015
Turismo fotográfico
Hubo un tiempo en que la mayoría de las fotografías tomadas
por los aficionados estaban relacionadas
con el turismo. Quienes tenían medios y tiempo para cambiar de aires estaban
moralmente obligados a captar con su cámara fotográfica los mejores o más
curiosos recuerdos del viaje. Ahora la fotografía digital ha potenciado el uso
de la fotografía en la vida cotidiana. El turismo ha sido bautizado con
diversos adjetivos en ocasiones peyorativos o más o menos nobles como el turismo sanitario, turismo político,
turismo sexual, turismo de borrachera,
turismo de alpargata, ecoturismo, turismo religioso, turismo arqueológico,
turismo etnológico, cicloturismo, excursionismo, turismo lingüístico, turismo
deportivo, turismo gastronómico, turismo de la tercera edad, o el turismo
cultural. Por otra parte conviene clarificar que la emigración, el espionaje,
el comercio no tienen nada que ver con el turismo. Otro asunto interesante es el tema del
viajero y del fotógrafo viajero. Ambos conceptos muestran una mayor preparación
del viaje, un mayor tiempo y un interés en convertir el viaje o la fotografía
de viaje en una forma de entender la vida.
Lo siento mucho, me he equivocado, me he fotografiado
En su día su majestad Juan Carlos I trató de disculparse por
dedicarse a la caza de elefantes con una frase que ha pasado a la historia: “Lo
siento mucho, me he equivocado.” Si hubiera practicado la caza fotográfica no
se habría armado tanto ruido y seguramente hubiese sido considerado un gran fotorreportero
y afamado artista-fotógrafo. Pero en estos momentos con el abuso de los selfies
muchos deberían excusarse con algo
parecido a “Lo siento mucho, me he equivocado, me he fotografiado.” De esta
forma tratarían que se les perdonase por las torpezas, vulgaridades y
obscenidades que suele poblar estos nuevos autorretratos.
domingo, 20 de septiembre de 2015
Las fotografías creen en Dios
Algunos negativos, algunos positivos y diversos archivos
digitales acaban sus días en el cielo de un museo, un archivo o una biblioteca. Pero lo habitual es que tras pasar una
temporada en un ambiente más o menos familiar acaben en el infierno del
abandono o de la destrucción. Las
fotografías tienen su corazoncito, su alma y sus creencias. Las hay que piensan
que su dios es el fotógrafo que las creó, otras sostienen la existencia de
diversas diosas-cámara. Desde hace unos
años ha surgido una secta que creen en los dioses-ordenadores. La última moda
son los dioses- teléfono móvil. Por
último existen los negativos y los positivos que creen en los dioses
coleccionistas, archiveros, bibliotecarios o historiadores de la
fotografía. Son numerosas las
fotografías, agnósticas y ateas. Muchas de estas imágenes descreídas se sienten
explotadas y maltratadas por fotógrafos, comerciantes y coleccionistas.
Reivindican que se las valore adecuadamente y que se las cuide cuando los años
se les echan encima. De alguna manera piden que el cielo o el paraíso sea su propia existencia y
no un mundo que nunca han visto.
Un mal gesto, una mala fotografía
Los malos gestos suelen causar malestar y dolor. Las malas fotografías también provocan reacciones negativas entre los sufridos espectadores y los avergonzados fotógrafos. El personal sanitario suele aliviar y curar los malos gestos. Los profesores, críticos y teóricos de la fotografía acostumbran a tener poca influencia ante las malas fotos y los peores fotógrafos.
sábado, 19 de septiembre de 2015
Demasiado tarde
Nunca es demasiado tarde para tomar tu penúltima fotografía.
Pero es mejor hacer las cosas en el momento más oportuno. El instante decisivo es
un ideal que sólo pueden cumplir los genios de la fotografía. Pero quedarse para
vestir santos fotográficos tampoco es la solución. A ciertas edades llegamos a la
conclusión de que ya está casi todo el pescado vendido y que no podremos afrontar
asuntos semejantes a las investigaciones
sobre historia de la fotografía y los proyectos fotográficos de nuestra juventud.
Pero sólo se vive una vez y no conviene rendirse demasiado pronto.
Lincoln Maiztegui
Acaba de fallecer Lincoln Maiztegui, un periodista,
historiador, musicólogo y ajedrecista
uruguayo que tuve la oportunidad de tratar hace muchos años. He leído
necrologías escritas desde España dónde era conocido como periodista especializado
en Ajedrez y desde Uruguay. En su país era profesor universitario, musicólogo, periodista
y desde luego ajedrecista. Llama la atención lo distintas que son las necrologías
al uno y otro lado del charco. También noto a faltar ciertas informaciones que yo
conozco de primera mano y que tenían que ver con las penurias de todo exiliado político
y de una personalidad muy marcada. Sería
maravilloso que descubriéramos diversas necrologías sobre Antoni Gallardo. Pero
no creo que tengamos esta suerte. En cualquier caso la figura de Maiztegui nos ayuda
a comprender a un apasionado por la música y muchas otras cosas.
Inglés básico, fotografía básica
La tragedia de los refugiados de guerra me permite
observar que algunos de ellos se expresan en un inglés básico. Entiendo lo que
dicen y al mismo tiempo me doy cuenta de sus limitaciones lingüísticas y de mi
nivel de inglés de supervivencia.
Si analizásemos el común
de las fotos seguramente deduciríamos que su nivel no llega al del nivel básico
de inglés o de otros idiomas. Estamos rodeados por imágenes de torpe sintaxis y peor gramática. Me parece tan complicado mejorar
esas fotos como conseguir la paz y la concordia
en Siria y otros territorios. Por otra parte me avergüenzo del maltrato que sufren
los refugiados en la vieja, hipócrita, racista y desconfiada Europa.
Tiendas de fotografía
Paso por varias tiendas de la cadena FotoPrix y no acierto
a distinguir cámaras fotográficas en sus escaparates. Supongo que la mayorñia de
sus clientes deben tomar fotografías con su teléfono móvil. Mal final van a tener las tiendas de fotografía.
La mujer de tu vida, la foto de tu vida
Los fotógrafos heterosexuales siempre valoraremos mucho más
a la mujer o las mujeres de nuestra vida que a nuestras mejores fotografías. La pasión por la fotografía no puede
sobrepasar el afecto, el cariño y la tensión sexual.
Cuerpos sin vida. Fotos sin vida
Sin duda prefiero tomar fotos sin vida que ser un cuerpo sin
vida. En cualquier caso no vale la pena morir por tomar una foto. Por desgracia
la fotografía con teléfono móvil ha potenciado graves y fatales accidentes.
Lo malo de ser un fotógrafo perfecto
Lo malo de ser un fotógrafo perfecto es que siempre habrá
alguien mejor que tú. En cualquier caso no faltarán críticos que denosten tu
trabajo, colegas que se mueran de envidia y amigos, familiares y conocidos que
te recuerden que tus maravillosas fotos apenas te dan para malvivir.
Dudas eternas, fotografías eternas.
No está demostrada la
eternidad de la fotografía. Sin embargo las dudas acompañarán siempre al ser humano.
Respirar con regularidad. Fotografiar con regularidad
Ante la duda respire. De otra forma puede que sea la última
fotografía que tome.
martes, 15 de septiembre de 2015
Tipos de interés y fotos de interés
Clarificar temas como este requerirían tertulias, debates, ponencias y hasta una tesis doctoral. A pesar de entender mucho más de temas fotográficos que de asuntos bancarios tengo claro que algunos tipos de interés te pueden arruinar y que fotografías que en su momento se consideraban interesantes en nuestros días apenas se valoran. También sucede lo contrario y el tiempo acaba revalorizando como obras de arte o de interés documental a fotografías que en su día tenían poco valor. Algo parecido sucede con las personas. Tipos que en la actualidad están en el candelero acabaran sepultados por el polvo de la historia. No podemos estar seguros de nada, ni de nadie.
Echar barriga y echar fotos
Con el tiempo los fotógrafos ganamos experiencia, paciencia y sabiduría. Por desgracia muchos no podemos evitar echar barriga. Los kilos de más nos hacen más torpes y más cansados. Sin duda el sobrepeso nos hace peores fotógrafos.
Del flaneur al phoneur
Si Charles Baudelaire, Walter Benjamin o Joan Fuster hubiesen conocido los teléfonos móviles con cámara seguramente escribirían algún texto que relacionase la figura del flaneur con la del phoneur. Dado que tan ilustres escritores nos dejaron hace tiempo me veo obligado a decir cuatro cosas sobre el tema. Creo que la inmensa mayoría de los paseantes curiosos de siglo XIX y del siglo XX adoptarían con entusiasmo la tecnología de la fotografía digital a través del teléfono móvil. Por eso los flaneurs del siglo XXI son también phoneurs. Siempre quedaran, como un servidor, incondicionales de la cámara digital. También podremos encontrar nostálgicos de las cámaras de carrete. Desde luego que subsistirán los partidarios del bloc de notas o de dibujo. Seguro que también muchos dibujarán y escribirán con sus dispositivos digitales.
No se puede fotografiar mal y pensar bien
No se puede fotografiar mal y pensar bien. Si tus fotos salen fatal o eres un negado para la fotografía o algo no va bien en tu cerebro. No dejes de consultar con un buen neurólogo si tus fotografías son cada vez peores y te sientes torpe, viejo y cansado.
¿Debemos rcoger las fotografías que caen al suelo?
En el suelo podemos encontrar diversos tipos de fotografías. Algunas caen de forma involuntaria y sus propietarios lamentan profundamente su pérdida. Pero otras imágenes son lanzadas con mala intención. Estas últimas suelen presentar graves y voluntarios deterioros. Los interesados por la fotografía, por otra parte, tratan de descubrir en las imágenes abandonadas supuestos valores documentales, artísticos, históricos, curiosos, procaces o escabrosos. De esta forma no puedo dejar de recomendar que miren el suelo de vez en cuando. Tarde o temprano encontraran una fotos que valga la pena o cualquier otra objeto más o menos valiosos o curioso.
domingo, 13 de septiembre de 2015
100 ideas que cambiaron la fotografía
100 ideas que cambiaron la
fotografía por Mary Warner Marien. Ed Blume, Barcelona, 1912
Made in China
La lectura de este libro me ha
resultado particularmente amena. Me ha interesado especialmente que
los temas tratados suelen estar actualizados hasta nuestros días
(2011). De esta forma se vuelve a incidir en la necesidad de
reescribir la historia de la fotografía periódicamente. Tal vez por
eso me este planteando revisar mi tesis doctoral. Por otra parte la
concisión y precisión de la autora ayuda a blogueros como quien les
escribe a plantearse mejorar su trabajo. El origen estadounidense de
la autora se nota en temáticas y autores. Por eso sería bueno
actualizar algunos temas a otros ámbitos como por ejemplo el
europeo. Nada más que pedirle a los dioses sabiduría, tiempo y
dinero para escribir libros como este.
José Daufi, els retalls d'una postguerra
José Daufi, els retalls d'una
postguerra. Por Albert Curto y Laura Tienda Onadaedicions.com,
Benicarló, 1914
Deberían hacerse más estudios sobre
las relaciones entre la música y la fotografía. En mis
investigaciones sobre Antoni Gallardo me supera completamente la
pasión que tenía por la música. Cabe destacar el estudio que acaba
de publicar en la revista Finestrelles n 16 el historiador Jaume
Seda sobre el fotógrafo y músico Tomàs Fàbregas. Ansel Adams fue
un reconocido pianista. Músicos fueron también los inventores del
Kodakchrome. José Daufí, tras estudiar música acabó montando en
Tortosa un negocio musical en el que que también se comerciaba con
la fotografía. Tras la Guerra Civil Daufí aumentó su interés por
la fotografía y compaginó el trabajo de estudio con los reportajes.
Su condición de adicto al régimen le permitió fotografiar
acontecimientos religiosos, deportivos,oficiales y populares. Como
estudioso de la navegación en el río Ebro he disfrutado como un
enano visionando las imágenes de una técnica de transporte que
agonizaba pero que las miserias de la postguerra hizo renacer. Me
gustaría tener la oportunidad de visionar las imágenes descartadas
en la publicación del libro. No se trata de criticar la selección
de los editores pero seguro que encuentro algún tipo de imágenes
que me interesan especialmente.
lunes, 7 de septiembre de 2015
Leche manchada y fotografías manchadas
En ciertos momentos degustar un latte macchiato te puede apetecer más que un café expreso, un cortado o un té con limón. Sin embargo a casi nadie le gusta una fotografía manchada. Por otra parte las llamadas manchas de honor suelen provocar baños de sangre en eres humanos que tienen el coeficiente mental de un mosquito y la mala leche de una pandilla de mafiosos y una división de las SS. Las manchas en la piel causan problemas estéticos y suelen ser síntomas de enfermedades más o menos importantes. La ropa manchada suele formar parte del uniforme de ciertos trabajadores y de personas descuidadas.
La mota de polvo, la rayadura, el amarilleamiento o la cagada de mosca suelen afectar a la parte más interesante de la fotografía. La tecnología digital no ha acabado con las manchas. A destacar las provocadas por las las motas de polvo acumuladas en los sensores.
La mota de polvo, la rayadura, el amarilleamiento o la cagada de mosca suelen afectar a la parte más interesante de la fotografía. La tecnología digital no ha acabado con las manchas. A destacar las provocadas por las las motas de polvo acumuladas en los sensores.
El fotografiar es como el querer
"El pintar es como el querer” refrán popular
La fotografía tiene una naturaleza mucho más realista y documental que la pintura. Pero a base de imaginación, esfuerzo y manipulación podemos conseguir imágenes particularmente subjetivas.
La fotografía tiene una naturaleza mucho más realista y documental que la pintura. Pero a base de imaginación, esfuerzo y manipulación podemos conseguir imágenes particularmente subjetivas.
domingo, 6 de septiembre de 2015
Aprender a fotografiar sin miedo
Aprender a fotografiar sin miedo, pero con cuidado, con
respeto, pero sin pudor, sin prisa, pero sin pausa, con arte, pero sin
artificios, con ternura, pero sin blandenguerías, con ironía, pero sin ira, con
cariño, pero sin celos.
Fotografía alternativa y alternativas a la fotografía
Existen diversas técnicas de fotografía alternativa y una infinidad de
alternativas a la fotografía. Pero yo prefiero la fotografía al desnudo, bien
limpia, algo perfumada y muy cariñosa.
Los errores más comunes del fotógrafo torpe
Los errores más comunes del fotógrafo torpe suelen estar relacionados
con una confianza excesiva en la “magia” de las cámaras automáticas, falta de
paciencia, pocas ganas de calentarse la cabeza, nulo interés por conocer las
fotografías de los grandes fotógrafos y una perturbadora mezcla de miedo,
atrevimiento y temeridad.
Aprender a ser más feliz con la fotografía
A la inmensa mayoría de
nosotros la fotografía no nos sacará de pobres, ni tampoco nos hará más
felices. Pero cuando te domina el virus del arte de la luz te sientes muy infeliz sin hacer fotografías,
ver exposiciones, consultar páginas webs fotográficas o leer libros
y revistas de fotografía.
Sentirse bien tratado y bien fotografiado
A todo el mundo le gusta
sentirse bien tratado y bien fotografiado. Incluso los masoquistas prefieren
salir bien en la foto y, todo lo más, sufrir de forma controlada en ciertas
ocasiones.
Somos fotógrafos
Somos
fotógrafos. Eternos enamorados de la imagen. Casi siempre
mantenemos el objetivo limpio y puro. En ocasiones logramos
magníficas imágenes. Con frecuencia cometemos inexplicables
torpezas. A menudo acariciamos a nuestra cámara como si fuera
nuestra pareja. Normalmente amamos a nuestra pareja como si fuera
nuestro mejor modelo. Deseamos con envidia, obsesión y lascivia las
mejores fotografías, cámaras, modelos y parejas de nuestros
colegas.
Somos
fotógrafos. Cada día nos duele más la espalda y las cervicales. De
tanto Photoshop arden nuestros ojos. Nos marean los excesos
digitales. Nos abruman los cambios tecnológicos. Por eso nos
enojamos con motivo. Sin hacer más comentarios, somos fotógrafos
sábado, 5 de septiembre de 2015
Comer demasiado, fotografiar demasiado
Es tan difícil tomar buenas fotografías en ayunas que tras
un festín pantagruélico. Tampoco es fácil clarificar el número de fotos ideal.
Si fotografías poco o nada te oxidas. Pero si fotografías a tontas y a locas
acabas abrumado con una cantidad de
fotos imposible de manejar.
La silueta censurada de Nuria Roca
Leo en la prensa que un hombre ha dejado morir ahogada a su hija en Dubai antes que la rescatara un socorrista varón. Por otra parte en una red social censuran la autofotografia de la silueta de la presentadora y periodista Nuria Roca. La intolerancia, el oscurantismo y el fanatismo de ciertos valores éticos, políticos y religiosos han convertido a la humanidad en un valle de lágrimas, de dolor y de muerte. Desde estas líneas vomito sobre los necios, los cretinos y los estúpidos.
Aylan Kurdi, el niño ahogado
Las fotografías de los aficionados suelen tratar de asuntos agradables, curiosos, divertidos y banales. Sin embargo los fotoreporteros suelen abordar la cruda realidad a palo seco. En esta ocasión la muerte parece confundirse con un sueño o un juego infantil. Pero la imagen del agente presagia la tragedia. A la playa le falta sol y bañistas y al niño le falta la vida. Seguramente se hubiera sentido muy feliz chapoteando o haciendo castillos de arena. Su hermano mayor, su madre y otros náufrago también han fallecido. Pero con esta fotografía se ejemplifica la muerte de todos. El cadáver de un niño de tres años parece provocar más dolor y más mala desasosiego que la muchos otros tan inocentes y tan necesitados de amparo como él. Mientras tanto el destino de miles de refugiados se convierte en propaganda electoral para demasiados políticos retrógrados.
Mientras seamos jóvenes fotógrafos
No es posible ser un joven fotógrafo eternamente.
Tarde o temprano se deja de ser joven, de ser fotógrafo y hasta de existir.
Horizonte sin futuro, horizonte sin fotografías
Un horizonte sin futuro es un horizonte sin fotografías
Callejones sin salida, fotografías sin salida
Los
callejones sin salida son una especie de agujeros negros en los que caemos sin
darnos cuenta. Allí te pudres en la nada y no devienes una sombra y una
caricatura. Las fotografías sin salida suelen ser una metáfora de tu propia
mediocridad o de tu insondable mala
suerte. Pero gracias a internet puedes intentar ingeniártelas de mostrarlas al
mundo
Sentirse vivo, sentirse fotógrafo
El día que no pueda tomar fotografías a buen
seguro estaré muerto y enterrado o a lo peor seré un muerto viviente.
Sentarse a esperar, sentarse a fotografiar
Conviene hacer de forma periódica un alto en el
camino, descansar y reponer fuerzas. Pero sentarse a esperar o dormir más de la
cuenta no suele ser el mejor camino para
tomar buenas fotografías. Pero no hay
regla sin excepción: los paparazzi y
muchos fotógrafos de prensa se hartan de esperar, pero tarde o temprano su
paciencia suele ser recompensada.
¡Quiero seguir fotografiando hasta el final!
Mientras me
queden fuerzas desearía tomar fotografías. Pero también hacer otras muchas
cosas como leer, investigar, escribir, pasear, escuchar música o hacer el amor.
Si solo pudieras salvar unas pocas fotografías ¿Cuáles eligirías?
Si solo pudieras salvar unas pocas fotografías ¿Cuáles
eligirías? Un servidor se quedaría, si pudiera, con una selección de las
imágenes que conservo de mis antepasados y de mis seres queridos.
jueves, 3 de septiembre de 2015
Con las fotos que tiran los fanfarrones
Resulta imposible digerir la ingente cantidad de imágenes que se toman en estos tiempos digitales. Pero más indigesto, si cabe, resulta la chulería, la torpeza y la ignorancia de los fanfarrones metidos a fotógrafos.
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