Conviene hacer de forma periódica un alto en el
camino, descansar y reponer fuerzas. Pero sentarse a esperar o dormir más de la
cuenta no suele ser el mejor camino para
tomar buenas fotografías. Pero no hay
regla sin excepción: los paparazzi y
muchos fotógrafos de prensa se hartan de esperar, pero tarde o temprano su
paciencia suele ser recompensada.