jueves, 9 de diciembre de 2010

Cartero

Charles Bukowski (2006, 1971) Cartero Ed. Anagrama, Barcelona

Cartero debería ser el libro de cabecera de muchos de nosotros. Es un espejo en que deberíamos mirarnos todas las mañanas. La obra relata la experiencia laboral de 12 años del autor en una compañía de correos norteamericana en la ciudad de Los Ángeles. El texto anda sobrado de alcohol, sexo, tabaco, tacos y de una realidad laboral que pone los pelos de punta pero que no es peor que la mierda que estamos tragando muchos de nosotros.
Jacobo Ruiz debería leerla inmediatamente por su experiencia laboral en el tema. Francisco Fernández tendría que hacer un hueco en su lista de espera para leer una obra en la que se expone con demasiada crudeza que sucede cuando uno pleitea con jefes y confía en dirigentes sindicales.
Joaquín Pérez, que se jubila muy pronto, evocará sin duda situaciones parecidas.
Mi hermano Félix necesita evolucionar de los relatos de Tolkein o de Javier Cercas y meterse en un mundo que conoce bastante.
Muchos listillos deberían complementar la lectura del BOE, el DOG y otros textos sagrados con Bukowski. En la vida hay que ser un poco trasgresor y bastante flexible. No basta con decir Amen.
Algunos amiguetes que son jefecillos deberían atemperar su comportamiento tras conocer las desventuras laborales de Bukowski.
Ciertas amigas que se quejan, con razón, de los hombres deben tomar buena nota de Charles Bukowski. A su lado la mayoría somos santos varones.
Quien os escribe le envidia por que gracias a esta obra logró quitarse el lastre que le oprimía, consiguió publicarla, hacerse famosillo, vivir de la literatura y dejar un trabajo que le asqueaba.