martes, 18 de diciembre de 2012

J. S. Sarrión, Boxeador, 1956,

9x13. Papel brillo, 1956

"A mi admirado pintor Manuel. Con toda cordialidad" De esta forma dedicaba esta foto a mi padre un boxeador a quien no tuve el gusto de conocer. Mi madre tampoco se acuerda de él. Por entonces mi padre trabajaba como pintor y rotulista en RENFE. Le gustaba dibujar y pintaba pisos para poder llegar a fin de mes.

Por desgracia la fotografía está destrozada. Aún así se ve perfectamente la hercúlea musculatura de este gladiador del cuadrilátero. A pesar de ser una toma de estudio la imagen simula acción pero esta recargada de hieratismo. Sin duda el boxeador se sientía más cómodo en el ring.