miércoles, 30 de julio de 2014

Antoni Arissa: Los Álbums de los salones internacionales

En este artículo Arissa recomienda estar al día del trabajo de los mejores fotógrafos consultando catálogos de exposiciones, anuarios y recopilaciones fotográficas. Gracias a este alimento intelectual y visual el aficionado logrará mejores fotos. Por otra parte el autor debe buscar la inspiración a quien Arissa compara con una mujer deseada que nos depare la mejor de sus sonrisas.

LOS ALBUMS DE LOS SALONES
INTERNACIONALES

Antoni Arissa. El Progreso Fotográfico 5, 1928, (págs. 100-101)


"Photograms, 'The American Annual, Album del
Salón Internacional de París , Luci ed Ombre algunos otros de los muchos existentes catálogos o anuarios de fotografías, recopilación de las mejores obras expuestas en los principales Salones y Exposiciones,
son tan necesarios e interesantes para todo aficionado con ansias de perfeccionamiento, como lo fueron al principio de su iniciación al arte de la luz los tratados de química fotográfica, de procedimientos, etc., etc. Gracias a
éstos puede documentarse perfectamente de una completísima
gama de procesos, recursos y trucos; puede, en otros términos,
situarse en condiciones para abordar, con más o menos éxito,
lo más difícil en todo arte: la concepción de la idea. Provisto
del bagaje de armamento apropiado y en favorables condiciones de usarlo, falta de lo que, de seguro, no le enseñarán las
letras de molde: la inspiración. Esta señora, como a tal variable y en extremo caprichosa, que, en repetidas veces, es
llamada para constatar a las menos, es de composición tan
original, que se hace imposible dar una relación ni remota de
cómo es; no existe, por complejo que sea, un vocabulario con
suficiente fraseología para dárnosla a conocer.
Pocos, muy pocos de los innumerables que la pretenden
pueden jactanciarse de su amistad, y ésta, para ellos, es tan
extremadamente efímera, tan poco estable, que basta uno de
sus muchos y bruscos cambios para trocarse en acérrima enemiga
del que favoreció un tiempo.
Imposibilitados en encontrar quién pueda presentarnos
a ella, debido a la inconsciencia de su carácter, procuraremos
entablar conocimiento con aquellos afortunados que mas la
conocieron y trataron. En los catálogos que mencionamos al
principio existen varios de esos amigos de la inspiración que
en sus obras nos revelan hasta qué punto congeniaron con
ella. Consultándoles, no sacaremos en claro de qué color son
sus ojos, ni si es rubia o morena, pero sí, y es mucho, reconoceremos
las huellas de su paso, de su fuerza y poderío, y quizás
en recompensa a nuestro tesón y ansia de conocerla en su volubilidad característica, también para nosotros reservara alguna de sus alentadoras" sonrisas...

A . A r i s s a