lunes, 7 de marzo de 2016

Muslos de mujer y fotografías que se nos escapan


“Sus muslos se me escapaban
como peces sorprendidos,
la mitad llenos de lumbre,
la mitad llenos de frío.” La casada infiel.
Federico García Lorca


Por desgracia las fotografías no se nos escapan como los muslos de la mujer amada durante el acto sexual. Si así fuera la carga erótica de las fotografías sería inconmensurable. Las fotografías con patas son ante todo infieles al fotógrafo o al conservador de fotografía. En gran parte la culpa es nuestra por no saber estar en el lugar oportuno y en el momento oportuno, o por ser torpe y negado en el manejo de la cámara fotográfica o en las técnicas de archivo y conservación. Puestos a elegir prefiero unos muslos de mujer.