sábado, 7 de enero de 2017

Cansarse con la fotografía

Caminar con una cámara es una de las formas más sanas para cansarse con la fotografía. Ver  exposiciones es también una costumbre saludable pero pesada. Machacarse la vista con los programas de retoque es un método óptimo para conseguir fatiga visual y  según como hartarse de la fotografía. El laboratorio fotoquímico, trastear con equipo pesado, pasarse la noche fotografíando las estrellas, dedicarse a la caza fotográfica o fotografiar bodas, bautizos y comuniones son otras de las actividades que según el caso cansan o hastían.