"No me importa que te alejes de mi lado
Ni que quieras arrancarme de tu mente
Si el destino nos pone frente a frente
Me amarás al igual que en el pasado" Omara Portuondo, Alma de Roca
La buena música cubana ayuda a evocar viejos amores. Pero por mucho que escuchara Alma de Roca en la atercipelada voz de Omara Portuondo no había forma de retomar la relación con su expareja. A Fabio le resultaba imposible e insufrible aquella desdicha. Deseaba con todas sus fuerzas volver a estar con la mujer que más había deseado. Tratando de atenuar su malestar callejeaba por Barcelona con una cámara de bolsillo. Fotografiar no es besar, ni hacer el amor. Pero es mejor que el alcohol, el bromuro y las benzodiacepinas. Por casualidad escucho un fragmento de la conversación que mantenían dos presumidas jóvenes veinteañeras tuneadas de rubio-Marilyn:
"Estuvimos cuatro meses separados. Pero
luego acabamos volviendo.”
El paso apresurado de las dos beldades solo le permitió admirar sus andares. Aquella frase perdida le empujo a telefonear a su ex. El teléfono estaba fuera de cobertura. Sin inmutarse le envío un email. Empezó la misiva con el estribillo de Alma de Roca. Acabó pidiéndole volver a salir. Aquel mismo fin de semana quedaron para cenar. Desde entonces volvieron a estar juntos.
