El Euromed de Valencia a Barcelona está repleto por la huelga de Renfe. Sin embargo el viaje transcurre sin incidentes. Para mi gusto hace un poco de calor...
Mis compañeros de viaje son todos inmigrantes. Una pareja marroquí con su hija y una mujer china. Todos hablan castellano menos la niña que es muy pequeña. No es fácil sacar a relucir un tema de conversación que nos motive. Finalmente les hablo de mi afición al té y las infusiones.
La ciudadana china demuestra ser experta en tes y sonríe cuando le digo que cha es la única palabra que conozco en chino. Los marroquíes comentan que invitar a té es para ellos una muestra de hospitalidad. Por mi parte les comento que en España sirven posiblemente los peores tes del mundo. Por otra parte invitar a te a los españoles suele ser tomado a broma o como una ofensa.
Llegamos a Barcelona sin novedad. Me despido hasta el próximo viaje, o hasta el próximo té.