Hasta el fotógrafo más entusiasta y experimentado suele obtener mejores resultados degustando exquisitos manjares que fotografiando segçun que cosas. Además los buenos ágapes derivan en un estado de satisfacción y relajación tal, que estamos más necesitados de un sueñecito que de un paseo o sesión fotográfica. Así pues plantéate un desayuno espartano, unaa comida sencilla o una merienda discreta si quieres tomar buenas fotos.