viernes, 5 de junio de 2015

La rodilla del fotógrafo

No lo dude, cuide sus rodillas mucho más que su cámara. Si consigue mantener unas rodillas sanas evitará molestos dolores y grandes limitaciones a la hora de caminar. Trate de mantenerse más bien delgado, declare la guerra a la barriga cervecera, alga algo de ejercicio, camine y siga las recomendaciones de su médico. Recuerde que la calidad de sus fotos tiene más que ver con su agilidad para moverse que con los megapixels de su cámara. Su torpeza física devendrá, seguramente, torpeza fotográfica y cosas peores. Y recuerde las listas de espera y los problemas de las prótesis de rodilla. Cruce los dedos, destierre la artrosis, y no se olvide de tomar buenas fotos.