miércoles, 14 de enero de 2015

Hacerse mayor fotografiando

Tarde o temprano la artrosis, las cataratas o males mayores nos invitaran a colgar la cámara para siempre. Pero en la gran recta final de nuestra existencia los fotógrafos podemos y debemos captar imágenes memorables.

 La experiencia es la madre de la sabiduría. Y si nos cuidamos a base de paseos fotográficos nos despediremos de este mundo por la puerta grande.

 Matar el tiempo con la fotografía es sin duda mucho más saludable que los excesos televisivos, los juegos de azar, o la observación de obras públicas. 

Plantarle cara al destino con una cámara tal vez no prolongue demasiado tu existencia. Pero sin duda tu calidad de vida será mejor. Y cuando llegué el día de tu última foto y esté al partir la nave que nunca a de tornar procura ir ligero de equipaje como don Antonio Machado.