Cuando los fotógrafos sueñan con la historia suelen
transformarse en historiadores de la fotografía, archiveros, comisarios de
exposiciones y cosas parecidas. Suelen tomar imágenes que tienen que ver con su
trabajo. Su obra personal acostumbra a
ser algo pesada y recargada. Cada clic está basado en la labor de fotógrafos
históricos o consagrados. Acostumbran a ser buena gente y de vez en cuando registran alguna foto buenecilla.