Estos señores llevan seis meses sin cobrar. No están despedidos (de momento), ni metidos en ERE, ni nada por el estilo. Pero cobrar, no cobran. Su empresa es de ámbito estatal y por lo que cuentan poliédrica y poliforma. El jueves 4 de abril protestaban de buena mañana en la confluencia de Fabra i Puig y Velia. Por lo que sé su problema es demasiado común. Pero suele plantearse más en pequeñas empresas en las que los trabajadores apenas tienen posibilidad de protestar. Les deseo mucha suerte y pido a nuestro querido gobierno que los trate la mitad de la mitad de bien que a los bancos.