Los fotógrafos pioneros del siglo XIX
fueron una variopinta minoría de artistas, científicos y oportunistas. En 1888
la empresa Kodak amplía esa minoría a los aficionados. El amateurismo se
multiplicó a lo largo del siglo XX. De esta forma la fotografía se transformó
en una práctica mayoritaria. Pero con la tecnología del teléfono móvil con
cámara la fotografía deviene, digamos, una tecnología globalizadora. Al
alcance, prácticamente de toda la población del mundo. Algunas excepciones son
los más desfavorecidos y ciertos países que por motivos religiosos o políticos
limitan o prohíben su uso.