jueves, 21 de agosto de 2014

Alegrías y alergias fotográficas

Pocas aficiones deparan tantas alegrías y alergias como la fotografía. Fijar el rostro de tus seres queridos, los instantes decisivos de tus aficiones favoritas o la belleza de ciertos paisaje suele ser fuente de grandes satisfacciones en el momento de apretar el obturador y también cuando se evocan esos recuerdos con el visionado de las fotografías

Los productos químicos o  el flash de magnesio en el pasado y las pantallas en la actualidad son fuente desestabilizaciones orgánicas molestas y en ocasiones graves. El polen y otros alergénicos transforman excursiones fotográficas en un valle de lágrimas.

No hay pues rosas sin espinas.