viernes, 7 de marzo de 2014

Capullo


La mayoría no se acuerda de las flores, ni de los gusanos de seda cuando escucha esta palabra. Muchos lo relacionan con la punta del pena La mayoría lo considera un insulto. Su significado despreciativo suelen compartirlo tanto el ofendido como el que insulta. Todos somos un poco capullos en algún momento y todos hemos sufrido las torpezas y las malas pasadas de los capullos.

Por cierto, si exportásemos a unos cuantos millones de capullos seguro que mejoraba el desempleo, la balanza fiscal, las estafas bancarias, el chauvinismo, la mojigatería, los recortes y otras desgracias.