miércoles, 6 de febrero de 2013

Colchón abandonado

Comenta mi madre que su abuela Bienvenida se fue de esté mundo sin poder dormir en un colchón de lana. Sin duda la suya fue una existencia sobrada de privaciones y llena de penurias. A pesar de los tiempos que corren todavía es posible encontrar legiones de cadáveres de colchones de diferente tipología. Por cierto, un servidor duerme en un colchón de látex.