Los caballos de cartón no te llevan a ninguna parte. Pero
nos ayudan a recordar nuestra infancia. Las cámaras de cartón pueden ser, sin
embargo, perfectamente operativas: Desde las cámaras estenopeicas caseras hasta las cámaras de usar y tirar de 35mm que
tuvieron bastante éxito entre los turistas antes de la llegada de la fotografía
digital