Los espárragos trigueros con ensalada fueron el plato más degustado. La gente tiene gana de cuidarse para poder celebrar muchas cenas como estas, tomar muchas fotos, ver muchas exposiciones y sobrevivir a la crisis. Lamentamos la desaparición de Arpi y los problemas que hay para exponer en ciertos restaurantes vegetarianos. Hablamos del colesterol, de asociacionismo fotográfico, de economía imaginativa, de sparrings fotográficos y de otras cosas que no me acuerdo. El ambiente fue tan distendido que parecía una sesión de risoterapia. Además, resultó mucho más barata que la consulta de un psicólogo. Unos 12 euros. Volveremos a quedar para cenar en mayo de 2013. Tal vez no sea el mismo estado. Pero seremos más o menos los mismos. Eso sí, también nos veremos en otros ámbitos como Can Basté, Sant Lluch, la AFC, la BC o el Caixa Forum. Se aceptan patrocinadores. Será un dinero bien invertido.
