Parece que el alma de la familia Pujol-Ferrusola tiene un procesador dual que reparte sus esfuerzos por el dinero sucio y un chauvinismo exacerbado. Seguramente con esos dineros turbios se podría reflotar el colapso del Hospital de Sant Pau o a desahuciados y parados de larga duración. Para acabar de empeorar las cosas el doctor Boi Ruiz pretende disminuir el 10% del suelo del personal sanitario y auxiliar. Al final muchos pagarán por trabajar.