Un fantasma recorre Europa. El fantasma de los recortes. Unos recortes selectivos que suelen respetar y/o ayudar a los más poderosos y que machacan sin piedad a los más débiles. Las tijeras se han convertido en sinónimo de paro, hambre, pobreza y desesperación. Los gobiernos han devenido marionetas manejadas por el poder económico.