(1908): La Vitalicia. Centro de seguros sobre enfermedades. Servicio Especial Sanitario
A continuación transcribimos un documento datado en torno a 1908, y destinado a controlar la salud de las prostitutas. El texto, sin datos personales, y sin fotografía, dice lo siguiente:
“Registro Sanitario
correspondiente al año 190... de la asegurada de... clase, Doña........ de...... años de edad, de estado... profesión... natural de... provincia de...domiciliada en... calle... número... piso... puerta... que tiene las siguientes
SEÑAS PERSONALES: Estatura....metro, ojos... pelo... nariz... boca, cara, color
SEÑAS PARTICULARES
Registrada número
Póliza de seguro número
A LAS MANCEBAS
Por el presente Registro Sanitario se manifiesta a toda asegurada en el Centro de Seguros sobre enfermedades "La Vitalicia", correspondiente a la clase 2, Y bajo condición expresa de haber ingresado al mismo en concepto de manceba, se le concede el derecho al reconocimiento facultativo semanal y gratuito, así como todo lo conducente poner en vigor la práctica legal de lo determinado en la Ley de 1 de marzo de 1908, sobre Higiene además de los restantes beneficios inherentes al seguro que determina el Reglamento de "La Vitalicia".
El Director,
Del reconocimiento verificado hoy día de la fecha a la asegurada Doña .............................................. resulta estar...
Barcelona... de ... de ...19...
El médico inspector El Director
Cambios de domicilio de la asegurada meretriz
Al final hay un texto que explica la nueva reglamentación de 1908. La cartilla continúa teniendo una fotografía de la prostituta:
Artículo 2, Las mujeres que por su completa voluntad quieran entregarse a la Prostitución, ya sea como pupilas en casas toleradas, bien acudiendo a casas de citas o bien libremente, habrán de solicitar por si mismas y en debida forma, su inscripción en un registro especial que se lleva en el Gobierno civil por la Inspección provincial de Sanidad en las capitales; y en las poblaciones que no tengan dicho carácter se lleva en la Alcaldía por la Inspección municipal de sanidad, acreditando, en este acto, dichas mujeres su personalidad, naturaleza, edad, estado, oficio, causas que la impulsan prostituirse, etc., entregando a la vez su fotografía para unirla a la cartilla que le será dada.” (ARDIACA, Grabados, 137 Var, sp, Barcelona, circa 1908)
